La Realidad virtual es una simulación tridimensional a través de algún sistema informático que proporciona información sensorial (visión, sonido y/u otros), con el propósito de hacerle creer al paciente que está en un medio virtual, pudiendo interactuar con este.

Es una técnica en auge, que pude tener diversas aplicaciones en la sanidad, y que va dirigida a personas con dificultad en el movimiento o en la integración de estímulos, siendo capaces de trabajar diferentes aspectos en un entorno seguro. 

Con esta técnica de tratamiento y valoración se puede trabajar el equilibrio estático y dinámico, control motor, activación muscular de diferentes segmentos del cuerpo, control de tronco, etc., de una manera inconsciente a través de un medio virtual simulado, haciendo posible que el paciente integre diferentes sensaciones, con la finalidad de generar un cambio en su sistema nervioso mediante la realización de movimientos que interactúen con este medio digital. 

Este método puede ir enfocado a diversas patologías como Parkinson, Esclerosis Múltiple, Ictus, ELA, enfermedades neuromusculares…, y otras patologías que generan dificultades en el desarrollo de las actividades de la vida diaria. Es una forma de trabajo segura con continua supervisión por parte del terapeuta.

Mediante la realidad virtual se puede proporcionar al paciente una movilidad en sus diferentes extremidades, trabajar la motricidad gruesa, ya que debe de desplazarse para interaccionar con el entorno virtual mientras ejecuta la acción que se le pide. A su vez, también se puede lograr una inhibición de patrones posturales inadecuados y rehabilitar la funcionalidad de diferentes segmentos del cuerpo.  

Otro aspecto con el que se puede trabajar la realidad virtual son las funciones cognitivas, la atención y la concentración, proporcionando una forma de rehabilitación diferente y motivadora.

Uno de los aspectos más importantes en rehabilitación neurológica es la repetición, para lograr un correcto aprendizaje motor a través de los cambios corticales que se producen.   

Pero la repetición por sí sola no es la que causa el aprendizaje motor, sino que debe ir ligada a un feedback sensorial sobre el resultado de cada una de las realizaciones, de ahí que la realidad virtual sea una técnica muy utilizada en el tratamiento neurológico, ya que permite estar en todo momento en constante relación con este medio virtual y recibiendo una respuesta de él según las acciones que realice el paciente. 

Existen diferentes formas de realizar esta técnica, en función las demandas y características del paciente.  En el IRF contamos con:

• Sistemas inmersivos: es la forma de aplicación de realidad virtual en la cual el paciente siente que está dentro de este entorno virtual. Para su realización se requieren diferentes accesorios como guantes, gafas, etc… para que el paciente se sienta dentro del medio virtual.
• Sistemas no inversivos: es aquella forma de realidad virtual en la cual el monitor o el sistema informático que se emplea, es la ventana al medio creado virtualmente. En este caso, el medio para interactuar es un mando o teclado, con los cuales también se puede realizar la rehabilitación.