Consejos sobre cómo cuidar los pies en invierno

Consejos de higiene:

Durante el invierno,  debes estar especialmente atento a la higiene y al cuidado de la piel.

1. Lava los pies diariamente: Esto mantendrá alejadas las posibles infecciones causadas por hongos y el mal olor. Es importante evitar los jabones fuertes. Asegúrate de frotar las áreas entre los dedos de los pies y secarlos bien.
2. Dúchate brevemente y no lo hagas con demasiada temperatura: Las duchas con agua muy caliente pueden ser muy agradables en invierno, pero en realidad dañan y resecan la piel.
3. Seca bien los pies: Asegúrate de que tus pies estén completamente secos antes de ponerte los calcetines y los zapatos de nuevo. Cambia los calcetines diariamente.
4. Hidrátate regularmente: Inmediatamente después de la ducha, cuando tu piel esté todavía un poco húmeda, aplica la crema o una loción hidratante para retener la humedad y reducir/prevenir las grietas y la piel seca. Ten cuidado y espera a que se reabsorba la crema antes de caminar. No lo hagas solo cuando veas que la piel esté demasiado seca o agrietada, es preferible mantenerla bien que tener que repararla.
5. Mantén las uñas de los pies cortadas: Dado que en invierno no se usan zapatos con los dedos descubiertos, es especialmente importante que mantengas las uñas de los pies a un largo apropiado. Esto reduce el riesgo de traumatismos, como las uñas encarnadas e implantadas, durante toda la temporada.
6. No use esmalte de uñas: El invierno no es el mejor momento para pintarse las uñas, así que, porqué no dejarlo hasta el verano. Usar esmalte de uñas durante más de una semana a la vez puede evitar que las uñas respiren correctamente y puede crear un caldo de cultivo para hongos y bacterias. Si tus pies están habitualmente dentro de botas en invierno, este efecto se magnifica aún más

Consejos sobre el calzado

Asegúrate de que tus zapatos o botas sean:

1. Lo suficientemente calientes y secos: Nunca pases largos períodos de tiempo al aire libre con zapatos o botas que no sean lo suficientemente  adecuados para el clima.
2. Apropiadas para la actividad: Si va a salir al hielo o a practicar algún deporte de invierno, necesita que sus zapatos le den la tracción y el agarre que necesita para mantener el equilibrio y minimizar el riesgo de lesiones.
3. Cómodas: Usa botas que se ajusten cómodamente y que no sean muy apretadas. El calzado apretado puede disminuir el flujo sanguíneo, lo que hace más difícil mantener los pies calientes. Debería poder mover los dedos, pero el talón, el empeine y la planta deben quedar bien ajustados en el zapato. Las botas deben tener una base sólida, un tacón de apoyo y cordones o correas para asegurar que pueda permanecer estable en superficies húmedas y resbaladizas. También es importante inspeccionar la suela de la bota, debes asegurarte de que tiene buena tracción y se mantiene bien sobre la nieve y el hielo.

Asegúrate de que cambias el  calzado cuando esté húmedo. Cámbialos siempre que se mojen, también te recomendamos que cambies los zapatos diariamente y que utilices polvos o aerosoles antitranspirantes o antimicóticos para que se sequen y no permitan la aparición de hongos o bacterias.

Recuerda que, a pesar de todos estos consejos durante el invierno pueden aparecer distintos problemas en el pie. Recuerda acudir al podólogo cuando empieces a tener molestias y no cuando el problema sea grave.

Jorge Gómez Triguero

Podólogo

Col 838282697